El sorbete de frambuesa es un postre ideal para el verano, pero casi nadie se atreve a preparar un sorbete en casa. Y es que, todos pensamos que es indispensable disponer de la típica máquina de hacer sorbetes que hay en las heladerías. Pero nada más lejos de la realidad, se puede preparar un sorbete sin necesidad de usar la máquina para sorbetes. Tan sólo es necesario utilizar distintos tipos de azúcares para preparar el almíbar.
La buena fama de esta receta durante el verano se debe a las frambuesas, ya que son una fruta rica en antioxidantes, vitaminas y minerales, propiedades que convierten a este postre en una bebida muy nutritiva. Además, el sorbete de frambuesa se puede consumir en distintos momentos del día: como postre después de una comida copiosa, a la hora de la merienda o como copa si añades un chorrito de cava o licor de frambuesa a la mezcla antes de congelar.
Receta del sorbete de frambuesas
El éxito del sorbete de frambuesas como postre después de una comida copiosa durante los días de verano en el uso de ingredientes frescos, nutritivos y naturales. Además los ingredientes necesarios para el sorbete son económicos y fáciles de encontrar en cualquier supermercado: 1000 gramos de frambuesas congeladas, 105 mililitros de agua, 130 gramos de azúcar granulado, 57 gramos de dextrosa y ocho gramos de estabilizante. La dextrosa y el estabilizante en casi todos los supermercados se encuentran en el pasillo en el que está colocada la levadura.
Para comenzar con la elaboración del sorbete de frambuesas es imprescindible preparar el almíbar, éste le dará el punto dulce a nuestro sorbete. Para ello hay que agregar a un bol grande todos los ingredientes secos, es decir, los 130 gramos de azúcar granulado, los 57 gramos de dextrosa y los ocho gramos de estabilizante. Y los removemos con una varilla de batir huevos manual.
El almíbar
A continuación, vertemos los 105 mililitros de agua en una cacerola. Y ponemos la misma en el fuego, hasta que ésta alcance entre unos 45ºC y 50ºC de temperatura. Cuando el agua haya alcanzado esta temperatura, tendrás que coger una cuchara y removerla continuamente mientras añades la mezcla de los ingredientes secos. Después tendrás que remover los ingredientes con una varilla manual para que se integren completamente y el polvo desparezca. Para que la mezcla quede completamente homogénea también tendrás que utilizar la batidora eléctrica.
Una vez que hayas realizado los pasos anteriores y sin quitar la mezcla del fuego. Utiliza tu batidora eléctrica, pero esta vez con la varilla, y calienta la mezcla sin dejar de batir hasta que llegue a los 85ºC. Cuando la mezcla haya llegado a la temperatura deseada, hay que pasarla a un bol. Prepara otro bol con agua fría y hielo, y sumerge en este el bol el que hayas puesto la mezcla. Continúa batiendo pero esta vez de forma manual durante dos minutos. Por último, cubre el bol con papel transparente y guarda la mezcla en la nevera durante ocho horas.
El puré de frambuesas
Cuando hayan pasado las ocho horas, podrás comenzar con la preparación de las frambuesas. ha llegado el momento de preparar las frambuesas. En primer lugar, calienta las frambuesas congeladas (también pueden utilizarse frescas) entre cinco y ocho minutos hasta que se derritan. A continuación, hay que triturar y colar las frambuesas. Para ello pon el puré resultante de haber derretido las frambuesas al fuego en el vaso de la batidora, bate bien con la batidora eléctrica y pasa el puré por un colador para quitar las semillas.
Utiliza un peso para verter 170 gramos del puré de frambuesas en un bol. El puré sobrante puede congelarse. Tras las ocho horas, saca de la nevera la mezcla, ésta tiene que estar bastante espesa y tener una textura viscosa. Agrega el puré de frambuesas y el almíbar al vaso de la batidora y bate con la batidora eléctrica.
Como los sorbetes no tienen grasa, ya que no llevan huevos, nata ni leche, para que adquieran la textura cremosa de un helado es necesario utilizar una licuadora. Lo recomendable es pasar la mezcla por la licuadora durante unos 25 minutos. El hecho de que lleve varios tipos de azúcares para hacer el almíbar es indispensable para que la mezcla adquiera la textura de sorbete sobre todo si no tenemos licuadora. Debe guardarse en el congelador a una temperatura mínima de -18ºC. Pero para servirlo la temperatura ideal es de -1ºC.