Las patatas revolconas es una de las tapas emblemáticas de la gastronomía tradicional española, especialmente en la región de Castilla y León. Este aperitivo que se sirve en muchos bares ha conquistado a muchos paladares gracias a su textura cremosa, su sabor ahumado y sus sabrosos torreznos crujientes.
Y es que, esta receta elaborada a base de ingredientes económicos y sencillos da como resultado una de las tapas más populares de los bares de nuestro país. Además también es conocida como patatas meneás o removidas.

Origen de esta tapa
La receta de las patatas revolconas se remonta a los platos que preparaban los campesinos para soportar las duras jornadas de trabajo en el campo. Y es que, este plato constituía una opción económica y energética para los jornaleros, quienes necesitaban alimentos contundentes que les aportaran fuerza.
Las patatas revolconas surgen en las provincias de Ávila y Salamanca, ya que en estas zonas ingredientes como las patatas y el pimentón eran abundantes y formaban parte de muchas recetas que se consumían a diario. Con el paso del tiempo, esta receta humilde ganó popularidad en los bares, convirtiéndose en una tapa típica que marida a la perfección una caña de cerveza o un vaso de vino.

Receta de las patatas revolconas
Ingredientes
- cuatro patatas medianas
- dos trozos de panceta en adobo soriana
- una cucharada sopera de pimentón dulce de la Vera
- una cucharadita de pimentón picante
- una pizca de sal
- una hoja de laurel
- un diente de ajo con piel
- un chorro abundante de aceite de oliva virgen extra
Elaboración paso a paso
- Cocer las patatas con piel junto a un puñado de sal y la hoja de laurel.
- Dejar templar las patatas.
- Pelar las patatas.
- Pasarlas por el pasapurés o aplastarlas con un tenedor.
- Cortar la panceta en tiras de un grosor medio.
- Calentar abundante aceite de oliva en una sartén.
- Freír la panceta con el diente de ajo entero sin pelar.
- Retirar la panceta.
- Templar el aceite en el que hemos frito la panceta.
- En el aceite de freír la panceta: sofreír el pimentón.
- Añadir el aceite en el que hemos sofrito el pimentón poco a poco sobre las patatas.
- Remover.
- Colocar los torreznos por encima.
Cómo hacer las patatas revolconas paso a paso
Para preparar esta famosa tapa que solemos ver en las barras de los bares españoles a la hora del aperitivo, pela las patatas y córtalas en trozos medianos. A continuación, colócalas en una olla con agua y una pizca de sal. Y ponlas a hervir a fuego medio-alto hasta que estén tiernas, lo que puede tardar unos 25 minutos.
Mientras las patatas se cuecen, vamos a preparar los torreznos. Para ello, corta la panceta ahumada soriana en trocitos de un grosor medio. Y calienta una cantidad abundante de aceite de oliva en una sartén amplia. Entonces, añade los trocitos de panceta y el diente de ajo entero sin pelar. Entonces fríe todo a fuego medio-alto hasta obtener unos torreznos dorados y crujientes.
Una vez fritos los torreznos, retíralos del aceite y colócalos sobre una fuente con papel absorbente para que suelten el exceso de grasa. Y en el mismo aceite donde has frito los torreznos, agrega los dos tipos de pimentón (la cucharada sopera de pimentón de la Vera y la cucharadita de pimentón picante). Para realizar este paso, deja templar primero el aceite. Y luego, en el momento de agregar el pimentón, sube a fuego alto y remueve rápidamente para que no se queme.
Cuando las patatas estén cocidas, machácalas con un tenedor o un pasapuré hasta obtener una textura homogénea. Y agrega poco a poco el aceite con el pimentón, mezclando bien hasta que las patatas queden suaves y con un color rojizo. A la hora de servir, pon las patatas en un plato o cazuela de barro. Y coloca los torreznos crujientes por encima.
¿Cuántas calorías tiene este plato?
Se trata de un plato contundente. De hecho, por cada ración de unos 200 gramos (aproximadamente una tapa), las patatas revolconas tienen unas 300 calorías. La mayoría proviene de los hidratos de carbono de las patatas y las grasa de los torreznos y el aceite. Aunque no es un plato ligero, es perfecto para ocasiones especiales o como un capricho dentro de una dieta equilibrada.
Cómo conservar las patatas revolconas
Si te sobra algo de este delicioso plato, puedes conservarlo en la nevera. Guarda las patatas en un recipiente hermético y consúmelas en un plazo máximo de tres días. Para recalentarlas, utiliza el microondas o caliéntalas a fuego lento en una sartén, añadiendo un poco de agua o aceite si es necesario para recuperar su textura suave. Ten en cuenta, que los torreznos deben guardarse aparte para que no pierdan su característica textura crujiente.
Con qué tipo de pan acompañarlas
El pan es un complemento esencial para las patatas revolconas, ya que permite disfrutar al máximo de su sabor y textura. La mejor opción es un pan rústico de corteza crujiente y miga densa, como el pan de pueblo o una buena hogaza artesanal. Este tipo de pan puede absorber perfectamente la mezcla de pimentón y aceite, sin deshacerse.